[Colombia] ¡No son vándalos, son mis compañeros!

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Friday October 19, 2018 13:02

by Acción Libertaria Estudiantil (ALE) - Acción Libertaria Estudiantil (ALE)

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El día 3 de octubre en la noche, luego de una gran asamblea en la Universidad Nacional sede Bogotá, se dio una pequeña manifestación que bloqueó la Carrera 30. Sin mediar palabras y en ausencia de alguna acción ilegal que lo requiriera, el ESMAD procedió a aturdir y gasear la concentración en la vía, dando como resultado 4 heridos, frente a esta acción de los uniformados, los estudiantes de la Nacional respondieron levantando las manos, algunos arrodillándose, y todos gritando la consigna “sin violencia, sin violencia”.

El día 3 de octubre en la noche, luego de una gran asamblea en la Universidad Nacional sede Bogotá, se dio una pequeña manifestación que bloqueó la Carrera 30. Sin mediar palabras y en ausencia de alguna acción ilegal que lo requiriera, el ESMAD procedió a aturdir y gasear la concentración en la vía, dando como resultado 4 heridos, frente a esta acción de los uniformados, los estudiantes de la Nacional respondieron levantando las manos, algunos arrodillándose, y todos gritando la consigna “sin violencia, sin violencia”.

Cuando el ambiente se despejó, los estudiantes se dispusieron en una fila para darle la mano a los agentes que los acababan de atacar. Esto se grabó y fue viral.Aquí empezó una propuesta mediática y política frente al movimiento que vivimos, es la exaltación de estas “nuevas formas no violentas” para emprender una persecución contra los “vándalos”.Días antes de la movilización del 10, empieza a rotar un volante creado por compañeros despistados de artes, en donde se propone “sabotear a los saboteadores”, esto con un gesto consistente en agacharse y señalar a quienes hagan grafiti el día de la manifestación. En reunión del Comité de Derechos Humanos de la UNEES se ve con preocupación la gran circulación del volante y se lo rechaza tajantemente la noche antes de la marcha, entendiendo que los actos de señalamiento podrían exponer a los compañeros a abusos de la Fuerza Pública como detenciones arbitrarias e ilegales, palizas u otros daños en la integridad física de las personas. Esto en últimas, dificultando la labor de los defensores y defensoras de DDHH.

El día 10, nos encontramos con la solidificación de esta jugada mediática y política de la cual algunos son perversos emisores, y otros idiotas útiles receptores.A la altura de la Jiménez con Séptima quienes hicieron grafiti, pinponearon o cartelearon propiedades privadas, en especial las sedes de los bancos, fueron atacados y expulsados de la movilización. Otros se dispusieron cepillo en mano a limpiar los grafitis realizados sobre los vidrios de las estaciones de Transmilenio Y los medios estaban contentísimos relatando la gran hazaña de quienes exiliaron a la pintura y desatando todo su desprecio hacia los vándalos.

La historia del día 17 de octubre no dista de las ya narradas: estudiantes protegiendo a los uniformados con cordones humanos, dándoles la mano, limpiando grafitis y declarándose diferentes y distantes de los violentos vándalos. Pero algo que no está siendo cubierto por los medios de comunicación es que luego de la movilización algunas personas subieron al Chorro de Quevedo, a donde llegaron policías que empezaron a intimidarlos y posteriormente agentes del ESMAD que arremetieron contra los allí presentes con aturdidoras y gases, nuevamente sin ninguna razón de peso para hacerlo y en un lugar de calles demasiado angostas que agravan los peligros de la dispersión por la fuerza.

Mientras algunos estudiantes asumen esta postura “no violenta”, a las 9 de la mañana del 18 de octubre, la emisora Blu Radio entrevistaba a Ricardo Alarcón subcomandante de la Policía, quien explica que ya se estaba en el proceso de identificación de 30 personas encapuchadas y que ya se había dado la captura de 2, uno de los cuales es estudiante de la UN. La emisora menciona además que se cree existe una banda delincuencial infiltrada en la movilización y responde a una pregunta con respecto a un defensor de derechos humanos de la Universidad Pedagógica que fue grabado por el periodista Santiago Ángel mientras ejercía su labor de defensor. Video en el que lo acusa de promover la pinponeada de la sede de RCN Radio y lo llama “vándalo” razón por la cual, dice la emisora, la policía está en su búsqueda para notificarle su captura. Orden de captura inexistente.

En el mismo juego de separar a los chicos buenos y a los chicos malos, Semana titula al medio día del 18 de octubre “Los vándalos que atacaron las instalaciones de RCN Radio y los estudiantes que las defendieron” El Tiempo titula a la misma hora “Bloqueos y desmanes en segunda marcha de estudiantes” y difunde el video de Santiago Ángel. El Espectador, el día 17 titula “RCN Radio vuelve a ser blanco de vándalos en Bogotá” y también se refiere al video de Santiago Ángel. Y así la situación solo empeora para los defensores de derechos humanos.

Para terminar de agravar las cosas, la representante Jennifer Pedraza le manifiesta a la FM en la mañana del 18 de octubre, estar indignada con el actuar de quienes grafitearon y pinponearon el día anterior, afirmando que esto le resta a la manifestación y poniéndose a ella y a la bancada de ACREES en una posición clara frente a la arremetida mediática que otros están sufriendo, seguramente buscando legitimar su organización frente a los idiotas útiles arriba mencionados.

Por último, es importante comprender que el término “vandalismo” no se encuentra tipificado en el Código Penal, por lo cual a nadie le pueden detener o capturar bajo la acusación de “vándalo”. Tampoco se encuentra esta palabra en el Código de Policía, y a pesar de que hacer grafitis sí figura en el mismo como una contravención, no como un delito, en el numeral 9 del artículo 140, el mismo código manifiesta en un parágrafo que bajo ninguna circunstancia el ejercicio del grafiti, justificará por sí solo, el uso de la fuerza, ni la incautación de los instrumentos para su realización. “Vándalo” y “vandalismo” entonces, no son tecnicismos jurídicos, son formas de tremendizar las acciones de los estudiantes para estigmatizarlos y perseguirlos. Esta no es una práctica nueva de los medios de comunicación ni de la política criminal del país, pasa todo el tiempo con “guerrillero”, y “terrorista”.

Por estas razones, hacemos un llamado a la sensatez, a la solidaridad, a la no estigmatización de los compañeros, a la defensa de los derechos humanos y la defensa de los defensores, a la denuncia de esta estratagema perversa de los medios de comunicación. Hacemos también un llamado a la crítica, para que nos preguntemos seria y profundamente sobre la violencia y la estigmatización, sobre quiénes son los más violentos y sobre qué tan violenta puede llegar a ser la pintura.

Acción Libertaria Estudiantil
Octubre 2018

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