En la tarde del pasado miércoles 13 de marzo se realizó una concentración en defensa de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), ante las objeciones que el gobierno de Iván Duque del Centro Democrático, presento a puntos sustanciales de esta legislación, surgida en marco del proceso de paz entre el gobierno de Juan Manuel Santos con la antigua insurgencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), proceso al que Duque y su partido se opusieron de forma sistemática y hoy en el poder se han propuesta “hacer trizas” de forma progresiva.
En la tarde del pasado miércoles 13 de marzo se realizó una concentración en defensa de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), ante las objeciones que el gobierno de Iván Duque del Centro Democrático, presento a puntos sustanciales de esta legislación, surgida en marco del proceso de paz entre el gobierno de Juan Manuel Santos con la antigua insurgencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), proceso al que Duque y su partido se opusieron de forma sistemática y hoy en el poder se han propuesta “hacer trizas” de forma progresiva.
La concentración que se extendió entre las 4:00 y las 7:00 pm, se ubicó en el costado nororiental de la Plaza de Bolívar frente a la escaleras de la Catedral Primada, y reunió algo más de 1.000 personas y algunas decenas de organizaciones sociales y políticas, que se encontraron para defender esta herramienta de justicia trasicional, clave en la concreción del Acuerdo de Paz entre la era la guerrilla más grande del país y el Estado colombiano, acuerdos que vienen siendo atacados desde hace años, y especialmente desde la asunción del nuevo gobierno, labor en la que se han destacado tanto la coalición uribista-conservadora en el parlamento, como la Fiscalía General de la Nación a la cabeza del abogado de Odebrecht Néstor Humberto Martínez y el oscuro sistema judicial de los Estados Unidos.
En este acto participaron dispersas en diferentes puntos de la plaza mayor, organizaciones de defensoras de derechos humanos como el Movimiento de Victimas de Crímenes de Estado (MOVICE) con coloridas pancartas contra la guerra y los Comités Locales por la Paz, sectores sociales como la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) con una bandera gigantesca, sindicatos docentes como ADE o bancarios como la UNEB que se presenta con una pequeña comparsa, la Tremenda Revoltosa batucada de mujeres feministas, así como organizaciones políticas como la nueva FARC, Marcha Patriótica, Juventud Rebelde, Unión Patriótica, TJER, el Partido Comunista y el fragmentado movimiento de Colombia Humana. También se hizo presente la campaña contra la extradición del ex líder guerrillero Jesús Santrich hoy detenido y en proceso de expatriación hacia los Estados Unidos, al tiempo que sobresalían pancartas llamando a abrazar la JEP, una gran bandera arcoíris del orgullo gay y los colores anapistas del M-19, así como la presencia de sectores estudiantiles y de docentes universitarios.
En la concentración se coreaban consignas a favor de la JEP y la paz, por el cese de los asesinatos de líderes sociales y contra la fiscalía de Martínez y el gobierno Duque. Un sector también entono cantos a favor de las FARC y el PCC, contra el imperialismo y a favor de los debilitados gobiernos progresistas de América Latina y reitero su culto a Bolívar, en su ya tradicional acto de rodear y encapuchar la estatua del prócer oligárquico, ubicada en el centro de la plaza.