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Bolivia: Entrevista a dirigente de la Fejuve de la Ciudad de El Alto

category bolivia / peru / ecuador / chile | community struggles | entrevista author Tuesday June 21, 2005 02:07author by José Antonio Gutiérrez D. Report this post to the editors

Bolivia: Entrevista a Monica Apaza, dirigente de la Fejuve de la Ciudad de El Alto, La Paz, en las jornadas de Octubre (El Alto, Bolivia, 23/08/04)
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¿Cómo se vivieron desde El Alto y desde su organización, las jornadas de Octubre?

Bueno, recordemos que antes de que pase este movimiento social de octubre, han pasado ya otros movimientos anteriores. El primero ha sido el bloqueo de los campesinos, luego vienen los del Chapare, que están peleando por la no erradicación[1], y luego viene lo de Febrero, y luego viene lo de Octubre. O sea, esto lo de Octubre no surge de la nada. Ha pasado algo antes, para que pase algo después en Octubre. Como tú lo decías, en ese momento yo era dirigenta de la FEJUVE. Nosotros convocamos un viernes a una asamblea general de todos los presidentes de la ciudad de El Alto, y empezamos a hablar sobre la Ley de Hidrocarburos y sobre el Gas. ¿Qué hacemos sobre el Gas? O sea, dos temas bien importantes. Convocamos harta gente, en nuestra orden del día en esta asamblea de presidentes ha sido primero hablar sobre qué hacemos con la Ley de Hidrocarnuros, queremos que se modifique, queremos que se anule, qué queremos. Sobre lo que es la venta del gas, no queríamos que se venda el gas por ningún país, ni por Perú, ni por Chile, ni por Argentina, ni por ningún otro país, porque primero queríamos industrializarlo para los bolivianos y recuperar lo que son nuestros petróleos para poder vender y tener más ganancias, no. Entonces, ha sido la discusión, ha habido horas que se han pasado discutiendo, y las conclusiones dicen: no queremos que nuestro gas sea exportado; dos, queremos que la Ley de Hidrocarburos del Gonzalo Sánchez de Lozada sea anulada. Entonces para esto tomamos un punto que es bien importante que ha sido el Paro Cívico indefinido de la ciudad de El Alto. Es decir, no se declaró un día de paro, dos días, no, se ha hecho indefinido. Eso era un viernes, y el paro empezaría el miércoles. Entonces, del viernes, ya la gente se reúne un sábado o un domingo. Cada presidente vuelve a su zona de cada distrito. Tomando en cuenta que la ciudad de El Alto se divide en nueve distritos, cada distrito está conformado por aproximadamente 60 a 140 juntas vecinales. Entonces, hay que multiplicar por nueve distritos y hubo una convocatoria necesaria de como 1.300 afiliados a la FEJUVE, quienes han hecho acceso y han respondido a lo que se ha decidido en nuestra asamblea. Se va el sábado, el domingo, a las asambleas de vecinos, se informa a la gente de base, de nuestros puntos sobre el gas, y un poco de concientización, no. Pero previo a esto, nosotros como Comisión Política, hemos hecho full seminarios sobre lo que es la Ley de Hidroacarburos y sobre lo que es el gas. Entonces, hemos hecho seminarios en cada distrito, hemos empezado a concientizar lo que es la gente de base. Entonces, la gente de base, los vecinos se han informado por los presidentes y adoptan, aceptan ese paro cívico. Entonces, ya se analiza qué pasos seguir para el Paro, no. Y el miércoles por la mañana se comienza con el paro, quizás un paro débil, porque no estaban en su totalidad los nueve distritos, los distritos alejados un poco. Entonces, me refiero al siete, al seis, al cinco, al cuatro, el ocho, el dos si han hecho paro. O sea, ya no entraba muchas movilidad de esta parte hacia la ciudad. Un poco fallaba lo que el distrito uno. Entonces, hemos decidido reforzar lo que es el distrito uno con más gente. Venimos, hemos reforzado, y el jueves en la mañana ya se paraliza. El transporte público, se paraliza. Empezamos el miércoles, jueves nos hemos reunido por la tarde y empezamos a decir “es une tema nacional, el tema del gas no es un tema solamente de la FEJUVE de El Alto. Necesitamos apoyo de organizaciones departamentales nacionales”, y empezamos a contactarnos. Hacemos documentos, cartas, y empezamos a darle, a full organizaciones llegamos. Vamos a la COB, vamos a la Central Obrera Departamental, aquí a la Central Obrera Regional, vamos a pedir apoyo a todas las otras organizaciones. Lamentablemente, dejamos el jueves eso, viernes tenían que responder, ninguna organización nos respondió. Ninguna. Eso me estoy refiriendo a la Central Obrera Boliviana, que si antes, antes de que nosotros como FEJUVE promulgáramos lo que es el paro cívico, dijo que se haría movilizaciones y paros en toda Bolivia. Lamentablemente, sus organizaciones afiliadas a la Central Obrera Boliviana no han aceptado eso, no se ha hecho ninguna movilización, ningún paro en ningún departamento, y tampoco la Central Obrera Boliviana nos ha tomado en cuenta como FEJUVE a nosotros. Lamentablemente, porque tampoco estamos en la estructura de esta organización, porque somos un ente cívico. Y ellos son más conformados por trabajadores.

Bueno, como decía, la COB no nos ha tomado en cuenta, porque no nos han convocado a un paro cívico. Nosotros hemos entendido que este tema del gas era a nivel nacional, no podíamos regionalizarlo. Por eso te vuelvo a reiterar, hemos mandado documentos pa que nos apoyen. No hubo respuesta, viernes no hubo respuesta, seguíamos solos como organización. Hemos dicho, “ya, continuamos solos”. Me acuerdo que han venido de la Federación de Maestros de la ciudad de La Paz, Federación de Maestros de la ciudad de El Alto, y eso era el viernes, el viernes teníamos una asamblea de presidentes. O sea, el miércoles empieza lo que es el paro cívico, viernes convocamos a otra asamblea de presidentes. Bueno, ahí se presentan varios dirigentes de organizaciones medianas, no tan grandes, bueno, las grandes no aparecen… convocamos a lo que es Jaime Solares de la COB, lamentablemente no viene, porque estaba en un enfrentamiento allá en Ventilla, y en ese momento no podía venir, en el distrito ocho, donde han caído los primeros muertos mineros, ahí han caído los primeros muertos en la ciudad de El Alto. Ahi estaba Jaime Solares. Pues lo llamamos, “estoy enfrentándome, no puedo venir”, o sea, no viene a la reunión de presidnetes. Entonces, nosotros hemos decidido ese día, con pocas organizaciones que había, continuar el paro cívico. Hemos dicho que esto vamos a ganar o vamos a perder. Así. Y continuamos. Y ese día viernes, nos estructuramos, qué estrategias tomar; es decir, porque la gente de base se puede cansar, como es un paro indefinido, ya preveíamos eso que no iba a ver comida, que iba a haber escacez en la canasta familiar de la gente. ¿Qué es lo que hacemos? Empezamos a formar comisiones. Comisión de comunicación para ir a los medios de comunicación para decir “tales documentos, tales se han promulgado, este tal”, segundo, era la comisión de coordinación y tercero, la comisión general. Me metí a lo que es la comisión de coordinación, la cual se reúne con todos los distritos, es decir, de un distrito tenía que ir a otro distrito para comunicar lo que se va a hacer, o sea, moverme en ese ámbito, tipo chaski[2], no, un mensajero, que iba a dar los planes estratégicos, las actividades estratégicas que se iban a realizar. Me meto a esa comisión, viernes seguíamos en paro cívico, la gente, los vecinos, han salido, han bloqueado las calles, ya hubo más fuerza en lo que es el apoyo a este paro cívico. El sábado por la mañana nos tocaba ir a cada bloque de vecinos que estaban bloqueando, a apoyar, a dar palabras de aliento. Y yo, mis compañeros, y lo que éramos la comisión coordinadora, hemos ido a visitar a todos los sectores posibles, porque la red de El Alto es grande, en un día entero no vas a poder llegar… Hemos ido al distrito dos, hemos pasado por el tres, hemos pasado por el siete, hasta llegar al ocho. Nuestra parada final era Ventilla, donde han caído los primeros muertos, mineros. Hemos llegado, hemos coordinado unas cosas con los mineros, y después ya noche, nos hemos venido el sábado en la noche, la caminata hemos terminado siete de la noche. O sea, todo el día estábamos en eso, coordinar con los distritos. Al volvernos lo que es el distrito ocho, pasamos por el distrito dos para volvernos a la ceja del centro aquí, ahí empieza lo que es la primera masacre, en el cruce Senkata. El enfrentamiento ha habido entre las fuerzas militares con la gente de base. Nosotros justo en ese momento pasamos, los medios de comunicación empiezan a anunciar “hay disparos, hay muertos, hay heridos, la gente está cayendo, los militares han venido”, así. Me acuerdo que mi presidente en ese momento, ya éramos perseguidos, desde el jueves ya éramos perseguidos, se nos llamaba. Y nosotros, ya no podíamos dar nuestro nombre, teníamos apodos. O sea, uno se llama Atahuallpa, otra se llama Bartolina. A mi me han puesto el nombre de Bartolina, Bartolina Sisa[3], o sea, sólo me llaman por ese nombre, no me pueden decir mi nombre Mónica. Entonces, así tenía cada cual. Mi presidente se va. Como era perseguido, se empieza, quizás, proteger. Nosotros que hemos salido, que hemos ido a enfrentarnos a lo que era esto, y vemos que han venido, así, tropas encamionadas, soldados jóvenes, y eso destacar, que son jóvenes que prestan su servicio militar, año entero que están prestando servicio militar, voluntariado. Se han utilizado a estos jóvenes que en su totalidad no sabían manejar un fusil. O sea, jóvenes que tenían miedo a enfrentarse a su pueblo. Me acuerdo que paso por ahí, y habían jovencitos que tenían miedo a dispararnos. Sus superiores les pegaban por la parte de atrás para que disparen, no querían hacerlo, les pegaban. Y ellos sólo podían disparar al aire…

De hecho, hubo militares que fueron ejecutados por negarse a seguir órdenes, me parece que hubo tres, ¿no?

Eso ha sido al día siguiente, el domingo. Yo te estoy hablando lo del Sábado. Entonces, pasa eso, nos enfrentamos, y uno de los disparos llega a lo que es el centro de la luz de ese distrito, no me acuerdo el nombre, ahí hay un cable grande, y ahí le apuntan, y todo ese distrito se apaga. O sea, no hay luz, completamente obscuro, sólo había luna llena y era lo único que alumbraba. Y en ese momento, las fuerzas militares han aprovechado para disparar, o sea, han disparado sin miedo, si habían niños, jóven, mujer, anciano, adulto, o sea, han disparado. Y han caído muertos, han caído heridos, y queríamos continuar en la lucha, pero nuestro presidente, mucha gente de la parte coordinadora que eran, han decidido irnos ya, porque éramos perseguidos. Entonces, al irnos ya a nuestros distritos, yo era del distrito cuatro, o sea, el distrito dos es en la zona sur de El Alto, y mi distrito, donde yo he sido elegida, ha sido el distrito cuatro, entonces de sur a norte me tengo que trasladar. Eso pasa la noche de la masacre. La gente ya no dormía. La gente ha escuchado, por los medios de comunicación se ha informado lo que estaba pasando en los diferentes distritos de la ciudad de El Alto. Mucha gente ha querido apoyar al distrito dos. Han venido, y por medio de palos, con lo único que podíamos defendernos en ese momento eran piedras y palos, que en su mayoría no llegaban alcanzar a las fuerzas militares, a diferencia de las balas que ellos nos daban. Eso pasa en la noche del sábado sangriento, El Alto se ha convertido en un luto total, en un río de sangre, porque han caído muertos. Eso pasó el sábado. Rápidamente, el domingo por la mañana, hubo una reunión de emergencia. Convocamos a la directiva de lo que es la FEJUVE y emepzamos a analizar de los muertos. Cuando en ese momento de reunirnos, empiezan a decir las fuerzas militares de la parte de Waki están viniendo por la zona norte, para entrar a lo que es La Paz, para militarizarla. Uno, porque recordemos muy bien que Gonzalo Sánchez de Lozada ese domingo por la mañana, se sabe lo de la matanza, y dice un discurso, y nunca se me olvida esa parte, “nosotros defendemos la democracia”, dijo. “Y la vamos a defender a costa de cualquiera cosa. No queremos a esos grupos subversivos, a esas organizaciones terroristas que están viniendo a querer mover a la gente. Vamos a defender, y vamos a utilizar a las fuerzas armadas”. Lo dijo en el discurso el domingo por la mañana el anterior presidente, el Goni. Entonces, en base a ese discurso que ha hecho, como ha visto que la población entera de El Alto ya se ha movilizado, ya ha habido un paro total e indefinido, ha tenido que pedir apoyo de otras fuerzas armadas. Una de estas fuerzas armadas, es el batallón de lo que es Waki, entonces, Waki a través de sus carros viene, por la parte norte como te decía. Entocnes, utiliza sus fuerzas militares, no. Entonces, en esa reunión, decimos, “nosotros tenemos que correr”, y no había movilidad, no había ni un triciclo, yo no tenía bicicleta, teníamos que ir corriendo hacia ese lugar. Llegamos, y la gente ya estaba informada que estaban viniendo fuerzas militares, y empiezan a movilizarse, empiezan a hacer zanjadas, o sea, huecos a los pisos, empiezan a traer botellas de agua para los gases las señoras. O sea, en ese momento, había una organización como nunca he visto. La unión y la solidaridad de jóvenes, niños, mujeres, adultos, nunca había visto. Ha sido una experiencia que nunca voy a olvidar. Y empiezan a decir “No, necesitamos esto”. “Necesitamos, unos dicen, agua para los gases” “nos van a disparar gases, agua”, dicen. Entonces, todos con sus bidones de agua. Otros dicen “¿cómo nos defendemos?” Y se traen petardos: “Si hay un herido, vamos a disparar y la gente va a apoyar”. Y ermpieza así a organizarse, no. Y cuando, aproximadamente dos de la tarde, ya empiezan a entrar las fuerzas militares. Me acuerdo que yo no estaba presente ahí, porque teníamos reunión de mi distrito con presidentes, en un lugar apartado. Pues cuando empiezan a disparar, nosotros empezamos a correr donde era el distrito, y ahí han caído los primeros muertos. A pies de Ex-Tranca. Una cuadra más arriba es el puente de Ex-Tranca. Ahí en el puente nos situamos, “¿qué hacemos?” Empezamos a quemar llantas, llantas, llantas, y hacemos una especie de escudo de humo, cosa de que las balas… o sea, ponte a pensar, estamos en Ex-Tranca aquí a una cuadra, y una cuadra más arribita, están las fuerzas militares, así, en posición de disparo. Todos. Y lo único que podíamos defender, era el escudo de humo, que yo lo denominaba así, porque era como un escudo de humo para que las balas no nos apuntaran. Entonces, disparaban una ráfaga de disparo, nos hacían. Y le empezamos a agarrar piedras. Y lanzamos y no, no hay caso, la distancia no alcanzaba a llegar. Y empezamos a pararnos, y empieza a hacer una ráfaga de balas. Y empiezan a gritar los jóvenes y los caballeros "¡Todos al piso!”, y todos nos tendemos al piso. Y empezamos a arrastrarnos. Y ahí es cuando ya para irnos, hacia atrás, hemos visto ya un caballero mayor caído. No se levantaba. A rastras hemos ido donde él, lo hemos visto y le ha impactado una bala en la cabeza. Al instante ha muerto ese caballero. Lo que hemos hecho, era jalarle del pie, así arrastrándole, jalamos, lo llevamos a la esquina. Hemos tenido la esperanza de que esté todavía con vida, pero ha fallecido. Ya es de los posteriores muertos en Ex-Tranca. Posteriormente, nos defendemos así, no. Y se acababa nuestro escudo de humo. Y empezamos a decir “sáquenos vecino algo, algo, así” Y sacaban colchones, sacaban madera, sacaban todo lo que podían, para que el fuego continúe, para que no nos baleen. Hemos hecho parar por lo menos una hora y tanto, una hora y media las fuerzas armadas. Y estas fuerzas armadas, como no podían pasar por donde nosotros estábamos, han decidido pasar por el otro lado que es Villa Ingenio. Y en Villa Ingenio también habían vecinos, y se han enfrentado ahí. Ahí también había muertos, porque hemos escuchado los disparos, los gritos, lo hemos escuchado. Es lo que pasa en esta parte.

Así es lo que pasa. Las tres masacres, el sábado por la noche en Senkata, el domingo por la mañana en el Río Seco, en Ex-Tranca y Villa Ingenio. Y la gente ya se ha pralizado totaslmente. Toda esa tarde hemos estado peleando, hubo heridos… y me acuerdo que había un soldadito, me acuerdo que estaban en posición de disparo, y cuando disparan, los mayores estaban detrás de ellos, y empiezan a patearles de la parte de atrás de la espalda, cosa que nos disparen. No querían. Y hay un soldado que se agarra la gorra, así de frente, y se la pone hacia atrás. Y yo no entendía que era eso. Pero muchos que han ido al cuartel decían que se están amotinando. Entonces, como se ha hecho eso y el fusil lo ha dejado al piso, viene su mayor por atrás, le dispara y le da por atrás, porque el soldadito cae de frente. Y hemos visto muchos de los que estaba en Río Seco, ha caído. El soldado no le ha prestado atención alguna, le ha agarrado y al camión lo ha tirado. O sea, herido, porque ya estaba herido. Hemos visto que ha caído al piso. Es lo que hemos visto, que el soldadito que se ha amotinado de no disparar, y querían hacer lo mismo los otros soldados, pero por miedo a que se les mate como a este soldado, les han tenido que obedecer. Eso pasa el domingo por la mañana, todo el día, la gente de El Alto ya sabía por los medios de comunicación. Las señoras empezaban a llorar, la rabia crecía, la ira ya ha comenzado, el dolor, la angustia. Y Gonzalo Sánchez de Lozada viendo esto… ojo, que me olvidaba otra cosa: nos estudiaba nuestros pasos, qué movimientos íbamos a hacer a través de un helicóptero. Había un helicóptero que constantemente se movía en todo El Alto para ver en qué lugar había convulsión, en qué lugar había reunión. Y en un momento, nos han lanzado un gas tipo rojo, un humo rojo, que nos ha hecho mal a todas las personas, mal, mal. Y empieza a estudiarnos a través de eso. Pasa eso, lunes por la mañana, empiezan a anunciar que hay un Estado de Sitio en El Alto. Salgo de mi casa, y veo las Fuerzas Armadas. En todo lo que es la autopista había camionadas de soldados. Lo que es la ceja, había tanques. Donde había la FEJUVE, había dos tanques. En la parte de la autopista, habían otros dos tanques. O sea, nunca había visto ver salir tantos soldados como esa vez. Y la gente ya, las varias organizaciones, la Ollada[4], que hasta ese momento no nos hacía caso alguno, no nos quería apoyar, ha paralizado totalmente. Se ha paralizado así todo. Toda organización ha apoyado. Los Gremiales han cerrado. Tampoco los Gremiales, que es una organización de El Alto, no querían apoyarnos con esta lucha del gas. Ninguna, ni los transportistas querían apoyarnos, ninguna de estas organizaciones que no nos han querido escuchar, ahora ya se han sumado estas organizaciones, y no porque antes había paro, sino por las masacres más que todo, no. Y la gente se ha empezado a concientizar. Es así que la gente de lo que es la Ollada, de la ciudad de La Paz, han empezado a hacer sus marchas, ya también queriendo apoyar por la masacre. Y en cada lugar, en cada distrito, en cada zona, se empezaba a tocar música, esa música que cuando una persona muere ponen, ¿no ve?. Entonces eso han empezado a poner. En todos los lugares se ha escuchado eso. Y los muertos eran velados en la misma calle. Eran velados no en sus casas, no. Algo diferente se ha hecho en la calle. La gente rezaba en las calles. La gente ha empezado a hacer una alfombra de vidrio, en todo El Alto no había una calle sin vidrios, no se podía pasar ni con bicicletas, ni con autos. A pie podías solamente caminar. Y ya era el quinto día, el lunes, sexto día del paro. Ya nuestra parte de alimentos ya no había mucho. Los mercados ya no tenían, no podía haber gases a la garrafa[5], porque como estaban las calles de vidrio, no podía pasar movilidad, no podíamos tener acceso a lo que es nuestras garrafas para cocinar, todavía para sobrevivir. Entonces, las organizaciones empiezan a sumarse. Empiezan a militarizarnos el lunes por la mañana, las Fuerzas Armadas se movilizan. Hemos continuado lunes, martes hemos velado, martes hemos abierto las puertas de la FEJUVE, para que muchas personas que han fallecido, vengan a ser veladas aquí. Han llegado muchas personas muertas así, en su mayoría gente humilde, que no tenía dinero. Han quedado muchas mujeres viudas, hijos huérfanos, han venido a llorar. En un momento, emocionalmente, los dirigentes nos sentíamos culpables; porque al ver a un niño sin su papá, o al ver a una mamá sin su hijo, hemos sentido momentos de desesperación, no podíamos más. Nuestra impotencia ya era… no sabíamos qué hacer.

El martes nos mandan una carta del gobierno, a nuestro presidente, el Gonzalo Sánchez de Lozada nos manda una carta para reunirnos con él. Para hablar con él, para quedar un acuerdo, para dialogar. Ya la gente ya no creía en eso. Le hemos hecho conocer a la gente de base, a los presidentes, han dicho que no, nadie va a reunirse con Goni. Entonces, han matado a nuestra gente, ahora queremos que él se vaya. O sea, la consigna se ha sumado otra, que era que Gonzalo Sánchez renuncie, se vaya. Miércoles pasa eso. Jueves por la mañana, convocamos a una marcha masiva en todo El Alto y La Paz. Y hemos bajado por todas las venas, las carreteras de la ciudad de El Alto, estas que llegaban a lo que es el centro, a la Plaza Murillo. Hemos bajado por el distrito cinco, porque es por (????) Valdiviano. Hemos bajado por el distrito uno, que es Alfaro-Murillo. Hemos bajado por La Ceja, hemos bajado por la autopista, o sea, por todo lugar hemos bajado. La gente se ha empezado a convulsionar, gente salía, mujeres, jóvenes, niños, una convocatoria como nunca. Han empezado a bajar, y nos hemos concentrado en la plaza en la Pérez Velasco. Hemos intentado ingresar a la plaza Murillo, donde está la sede del gobierno, pero hemos visto que en esta plaza había ya, pus, tanques cuidando, soldados ahí cuidando. O sea, la impotencia y la rabia de la gente. Y la solidaridad de la gente de Ollada, que nosotros al marchar, nos daban agua, nos daban refrescos, nos daban pan, porque sabían ellos que estábamos a nueve días ya, de paro cívico. Ya no había nada y la gente se daba cuenta. La parte solidaria se ha dado esto, nos han empezado a apoyar. Jueves, el viernes por la noche si no me equivoco, esta marcha el jueves la damos, retornamos de la Ollada a lo que es nuestras casa, viernes por la tarde escuchamos la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada, porque el eslógan, o mejor dicho, el tema esencial de esta convocatoria a esta marcha, ha sido la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ministros. Y el viernes por la tarde sale la renuncia. Lo único que ha habido ha sido lloro, lamento, angustia, después de esto, y que quizás no devolvía mucha gente que ha perdido a sus seres queridos el que Gozalo Sánchez renunciara, no devolvía algo de ellos, porque han perdido algo más valioso. Pero hemos ganado la lucha. Lo hemos hecho.

Y algo que no me quiero olvidar y quiero destacar en esto, que el miércoles, o sea, el jueves salimos a la marcha, pero un día antes, o sea, el miércoles, mucha gente de la Ollada han salido a figuretear, o sea, a querer la lucha del pueblo alteño, agarrársela ellos. ¿Cómo?. Han entrado a huelgas de hambre. O sea, qué horrible, no, quieren figurar, que una lucha que ha sido del pueblo la han querido agarrar, y ojo, que los medios de comunicación, desde el día miércoles que hemos entrado a paro cívico, no nos han dado cobertura aquí en El Alto. Cuando todos hemos pedido que nos den espacio para hablar sobre los temnas de este paro cívico, no nos quisieron dar. Ha habido pocos. Entre ellos el que más se ha destacado ha sido el canal 4, que ha sido acogido por todos los alteños. En todos los otros medios de comunicación, no éramos recibidos por ninguna persona. La gente misma se ha dado cuenta que hay medios de comunicación que sirven a la oligarquía, que sirven a este sistema neoliberal. Que sirven al Gonzalo Sánchez de Lozada. Entonces, sólo canal 4 estaba mostrando esto, no. Y el miércoles por la mañana, los medios de comunicación se van y muestran la huelga de hambre que estaba haciendo la gente de la clase media, queriendo figuretear, no. Eso lo quisiera destacar.

Bueno, ya para terminar, el viernes pasa eso, Gonzalo Sánchez de Lozada renuncia, mucha gente ha festejado acá en El Alto, se han escuchado petardos toda la noche. Sábado, domingo por la mañana, constitucionalmente asume el cargo de presidente Carlos Mesa. Y sube aquí a la ciudad de El Alto, donde es nuestra sede de la FEJUVE, sube a El Alto ese domingo, no, y empieza a hablar un discurso que mucha gente ha empezado a creer en él: a decir que él va a ser el que nos va ayudar, que él va a responder a nuestras demandas y que él iba a castigar a los responsables de estas masacres. Es así como ocurre Octubre, no. Ya el día lunes las actividades normales, pero los muertos seguían, los heridos tal, no había indemnización de parte del gobierno para heridos y fallecidos. Es una primera fase lo de Octubre, luego vienen otras luchas, luchas por qué, por indemnizaciones a heridos y fallecidos. Y los entierros. Hemos ido el miércoles, si no me equivoco, hemos ido a enterrar a mucha gente que ha fallecido. Eso es lo que ha pasado en sí lo de Octubre.

¿Cuál es tu opinión de la administración de Carlos Mesa respecto a las aspiraciones que tenía el pueblo cuando hace renunciar al Goni?

Bueno, yo tuve una posición desde el principio. Yo no estaba de acuerdo de que constitucionalmente se tome a Carlos Mesa, porque él se ha querido mostrar como una persona limpia, transparente, que no ha tenido nada que ver con esto. Pero mucha gente no se da de cuenta de que él sabía lo que estaba haciendo el Gonzalo Sánchez de Lozada, sabía con qué gente, con qué partido se han tirado a las elecciones[6]. O sea, yo no creo en la honestidad ni en la transparencia del Carlos Mesa. Ha prometido muchas cosas, entre ellas, ha prometido hacer juicio al Gonzalo Sánchez de Lozada, ha hecho un decreto en octubre, que lo ha limpiado a él, a sus gobiernos, a sus ministros, de los muertos que ha habido en octubre. O sea, limpio. No ha cumplido. Segundo, ha tomado un discurso de que nosotros hemos pedido referéndum en octubre, y eso es mentira. En ningún momento ha habido el tema del referéndum en octubre. El tema esencial eran dos: que se anule la Ley de Hidrocarburos de Gonzalo Sánchez de Lozada, y que no se exporte nuestro gas. Esa era la consigna general del paro cívico. No hemos pedido referéndum. Además, hace un referéndum para hacenos dormir, para hacernos apaciguar a la gente. Mucha gente ha creído en él, mucha gente a puesto su esperanza en él, no, de que va a respondernos, de que ahora sí es una persona joven, profesional, de que va a servir a Bolivia. Hasta ahora no le veo resultado. Sigue exportando nuestro gas, lo ha exportado a Argentina, y aún más, después del referéndum sigue con los mismos contratos que se han hecho en la Ley de Hidrocarburos del Gonzalo Sánchez de Lozada, continuamos siendo expropiados, expropiado nuestro gas por las petroleras. O sea, no ha cambiado absolutamente nada. No creo en Carlos Mesa. Lo que yo creo, es que la gente de pueblo, la gente de base, de organizaciones, deberíamos movilizarnos para tomar el poder. O si no, es para convocar a nuevas elecciones, para que nueva gente pueda entrar. Porque él está sólo siguiendo la misma política de Goni, en sí, no está mostrando un cambio positivo, un cambio diferente como él estaba presentando. Muchas organizaciones han caído en creerle, lamentablemente, ahora vemos las consecuencias y vamos a verlo más. Está aumentando el gas, la asamblea constituyente posiblemente se retrase más, hasta que terminé su gestión. Se muestra como un gobierno que no tiene apoyo parlamentario y eso es mentira, tiene apoyo de varios políticos, de varias organizaciones políticas partidarias. No más instalan un discurso diferente a lo que es Bolivia. Y además destacar que es un buen orador, eso nadie lo va a negar. Sabe convencer a la gente, pero mucha gente no estamos viendo coyunturalmente las cosas que ha prometido ante Octubre y cómo lo está cumpliendo ahora.

¿Crees tú que a mediano plazo se van a retomar las movilizaciones y que pueda haber una alternativa popular a los gobiernos que se imponen desde arriba?

Ahora hemos visto, en FEJUVE, por ejemplo, en su último, decimotercer congreso, se ha promulgado, se ha puesto mandato, un paro cívico antes del referéndum, para decir NO al referéndum. Ha habido una debilidad, no se ha adoptado totalmente, no se ha hecho caso a este paro. Mucha gente ha ido a votar. No en su mayoría. El resultado del referéndum no es un total fracaso del pueblo boliviano al decir NO al referéndum, sino que él (Mesa, n. del e.) lo está mostrando como algo a favor de él. Ahora, las movilizaciones van a continuar, por que, porque se ve que Carlos Mesa no está cumpliendo con lo que ha dicho. Ya lo estamos demostrando. El día de hoy, por ejemplo, se ha hecho un paro, no con tanta fuerza como quisiéramos, de los transportistas con respecto a lo que es el gas. Mañana pasado, va a haber una marcha masiva de la ciudad de El Alto a la ciudad de La Paz, sobre el tema del gas también, que está convocando FEJUVE. También anuncia movilización la Central Obrera Regional con respecto a lo que es el gas. También los Gremiales se están movilizando, o sea, ya está empezando a surgir nuevamente las movilizaciones en el tema eje que es nuestro gas. Y con estas movilizaciones, si Carlos Mesa no responde a lo que ha prometido, no va más de este año. Este año, aproximadamente hasta mediados del próximo año, no va más. Se va a convocar nuevamente a elecciones, para que éste salga y pueda ingresar otra persona. Y sería positivo que ingresara una persona a través de la asamblea constituyente.

¿Cuál es la apuesta que hacen ustedes sobre la asamblea constituyente?

Ahora, muchas organizaciones están discutiendo de quiénes van a ir a la asamblea constituyente. Se están olvidando del qué van a tratar dentro de la asamblea constituyente, que sería lo primero que cada organización debería tratar, qué temas se van a tratar en esta asamblea. Ahora, muchas organizaciones están organizando para llevar delegados a la asamblea consituyente, pero no está con tanta fuerza. Lamentablemente, estamos cerca de elecciones municipales, y mucha gente está distraída con ese tema, y no está dando caso a lo que es la asamblea constituyente, que posiblemente, sea el próximo año. Ahora bien, pienso yo, y es una posición que tengo, la asamblea constituyente debería ser una asamblea popular, es decir, que no deberían ir gente de organizaciones, sino gente de base. Un ejemplo: El Alto, se divide en distritos, por distritos que salga un representante que pueda ir a la asamblea consituyente, y ese representante va a ser controlado por su gente de base. Y esa es la propuesta que estamos lanzando con organizaciones… nosotros coordinamos con mujeres, con coordinadoras, con Fundación Solón, y con organizaciones juvenilles. Es la propuesta que estamos lanzando al gobierno, a través de seminarios y talleres que estamos realizando.

¿Alguna cosa antes de terminar la entrevista?

Si, aclarar algo, no. Que el referéndum no lo hemos pedido, y vuelvo a reiterar, no lo hemos pedido en Octubre. Aparte de eso, nos ha mostrado Carlos Mesa, que el referéndum era lo máximo, que nos iba a cambiar definitivamente, que iba a haber un cambio en Bolivia. Hasta ahora no se ve eso, porque, lamentablemente, vivimos bajo un sistema capitalista y un modelo neoliberal. Si este sistema y este modelo no cambian, cosa que se modifique dentro de esto, no va afectar ni a favor, sólo va a ir a peor. Entonces, las luchas populares deben de ser unidas para cambiar este sistema, y poner un sistema nuevo, donde haya la equidad y la igualdad que muchas personas estamos pidiendo, no. Tenemos recursos, tenemos los recursos minerales, recursos petroleros, recursos naturales, la disponibilidad que Dios nos está dando para que Bolivia pueda surgir, pero pienso que debería ser bajo un sistema igualitario y equitativo.

¿Piensas que desde las luchas populares que ha dado el pueblo boliviano hay la posibilidad de ver cómo este sistema va a ser?

Exactamente. Y esto un punto clave sería la asamblea constituyente. Si muchas organizaciones nos organizamos para llevar temas así, no solamente hablar quiénes van a ir, sino temas importantes que deberíamos tratar en la asamblea constituyente, yo creo que es posible, desde la gente de base, transformar nuestro sistema, nuestra sociedad, nuestra economía, nuestra política.

[1] Del cultivo de Coca (n. del e.)
[2] mensajero del Inka (n. del e.)
[3] Bartolina Sisa era esposa de Tupaj Katari, insurgente aymara que participó en la gran sublevación de Tupac Amaru en 1780, liderando la sublevacion indígena en La Paz (n. del e.)
[4] La ciudad de La Paz. (n. del e.)
[5] Garrafa de gas, es el balón de gas como se le llama en Chile (n. del e.)
[6] Carlos Mesa es del mismo partido de Gonzalo Sánchez de Lozada y fue vice presidente de su gobierno, y se candidatearon juntos como presidente y vice-presidente (n. del e.)

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